Mi novia trató de sacar unos calcetines de una tienda, y las cosas se pusieron calientes

Después de un paseo pausado por el centro comercial, mi ardiente pelirroja y yo decidimos saltar a una tienda local.Al navegar por los calcetines, ella juguetonamente se cogió un par y los ocultó en su cartera.La mirada pop de los guardias de seguridad nos hizo revueltos por la salida, lo que llevó a una emocionante persecución por la tienda.La prisa de la adrenalina convirtió nuestra escapada en una apasionada revolcón, con ella ansiosamente agachada en el asiento trasero de mi coche.No perdí tiempo en hundirme en ella, su delicioso pelo rojo cayendo sobre nosotros al bajarnos y ensuciarnos.La vista de sus mechones carmes que se azotaban solo alimentó mi deseo más.No pude resistir la urgencia de prestarle atención, mi lengua explorando cada centímetro de ella, clavándola de placer.En una ferviente exhibición de pasión, la tomé por detrás, su pequeño marco retorciéndose en éxtasis bajo mi tacto.Nues escapacita nos dejaron sin aliento y satisfechos, un testimonio de nuestro deseo compartido e insaciable.